ESTADO CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Francisco ha recorrido esta mañana, antes de las 9 (hora romana) la Plaza de San Pedro, a bordo del jeep blanco descubierto. No quiso cristales blindados entre él y la gente, dando una muestra más de la cercanía de la que ha hecho gala desde que fuera elegido sucesor de Benedicto XVI.
A mitad de trayecto, el argentino Jorge Mario Bergoglio bajó del coche para besar a un discapacitado. También besó a varios niños que le acercaron durante el recorrido. E, incluso, se animó a extender la mano y aferrarse de muchos fieles, que por esas horas aguardaban en inicio de la misa de asunción.
El jeep del Papa, abierto, se ha utilizado sobre todo para recorridos del Santo Padre en la Plaza de San Pedro. Uno de los episodios más tristemente recordados es el atentado que sufrió Juan Pablo II en 1981 a bordo de un Jeep Fiat distinto al usado hoy por el Papa Francisco. Benedicto XVI usó en varias ocasiones ese mismo Jeep. En 2007 la seguridad que rodea al Pontífice impidió que un hombre de 27 años subiese al vehículo. LA GACETA